Crónica IRONMAN 70.3 Valencia

Primera edición de esta prueba de media distancia de la franquicia de la gran M, inscrito desde el primer día que se anunció, tengo cada vez más claro que siempre que pueda no voy a renunciar de disfrutar de pruebas de este nivel tan cerca de casa, ya no solo nivel organizativo, garantizado por la marca que lo respalda, sino que viendo el respeto y amor de la ciudad de Valencia por el deporte y la lista de PROs que después se sumaria, el éxito estaba garantizado.

El viaje comienza con la incertidumbre de los entrenos de los últimos meses, muy constante y con muchas ganas, pero sin poder, sin querer, llegar a los volúmenes del pasado. Es cierto que quizá haya sido más constante que en preparaciones anteriores, y muy probablemente haya sido por esa "frescura" de no plantear grandes entrenos, de hipotecar tardes o mañanas enteras semana tras semanas, era algo que ahora mismo con los dos niños no entraba en mi cabeza, no por no poder hacerlo, que todo se puede si se quiere y se tiene la compañera de vida que me ha tocado a mí, pero últimamente sopeso muchísimo más el disfrutar las cosas fluyendo, sin forzar, que el apretar la maquinaria para llegar por los pelos y con el gancho a todo lo deseado.

El viaje en sí era un reto, los dos niños, viaje de larga distancia y todos los quehaceres que supone los días previos una prueba de este tipo.

El viaje en sí era un reto, los dos niños, viaje de larga distancia y todos los quehaceres que supone los días previos una prueba de este tipo: registro, activación, material, check-in, madrugón, prueba, recuperación y vuelta a casa... Pero todo fue de lujo, un poco de lógica, prioridad a la familia sin descuidar la prueba, la ayuda de los super-abuelos y la dirección de la mami, nada podía salir mal.

El Viernes toca llegar a nuestro alojamiento y escapada rápida a La Marina de Valencia, punto neurálgico del puerto de la ciudad convertido en un parque de atracciones para triatletas. Dorsales en el mismo edificio Veles e Vents y feria del corredor a pie de dársena, increíble chiringuito en inmejorable lugar. Dorsal 1719, mochila preciosa y como novedad la camiseta pasa de ser Finisher a conmemorativa, detalles sin importancia.

Sábado de activación y check-in. Activación por la zona de El Saler, increíble entorno para disfrutar del deporte y la familia, ciclismo por carreteras agrícolas con más bicis que coches y carrera por interminables caminos entre pinares codo con codo con las inmensas playas mediterráneas y en inmejorable compañía, ¡gracias PRO!.

La tarde quedó reservada para la entrega de material, algo más compleja de lo habitual al contar con dos transiciones separadas por casi 3km, a lo que había que sumarle que la bolsa del agua no sería la misma que la de la muda limpia, lo que suponía 4 bolsas para una sola prueba. Con la compañía de mi inseparable Manel y la más que agradable visita de nuestro "representante" para esta ocasión, Sete, dejamos la bici en el Tinglado número 2 del puerto, escenario digno de película histórica, y las zapatillas en el mismo cauce del Turia. Premiándonos con una visita final a la línea de meta, en pleno corazón de la Ciudad de las Artes y las Ciencias y meta de nuestra amada Maratón de Diciembre, para dejar la bolsa con la ropa que luciremos al recoger nuestra ansiada medalla.

El día comenzaría temprano, no es nada nuevo, pero las 5:00 am siempre duelen, desayuno ligero, paseito fresco para facilitar la parada en "boxes" y furgo hasta Valencia, pequeño incidente con el parking previsto, calles ya cortadas, pero nada que no se solucionara con actitud positiva y 200m más de caminata, nada grave.

Apenas amanece y ya tenemos las bicis revisadas y la alimentación en su sitio, es hora de buscar un lugar cómodo y cercano a la salida donde ponernos el neopreno y acabar con los últimos detalles. Lo de la imagen del puerto y el enclave del punto de salto al agua con ese amanecer al fondo es otro rollo, hay que vivirlo. Consejo gratuito, NUNCA os perdáis la salida de un triatlón, sin lugar a dudas deja las mejores postales para nuestras retinas.

Pronto cojo lo que para mi es velocidad de crucero, como siempre no tener mucho que contar del agua siempre sin buenas noticias.

Ya en los cajones de salida Manel decide avanzar 5' en su previsión, yo prefiero ser realista y aguardar delante de mi grupo natural. No pasan ni 25' de la salida de los PROs y ya estamos encima de los pontones de salida del puerto buscando la alfombra roja donde saltar. Llegado al punto veo que hay más altura de la que yo esperaba y decido ser conservador y saltar de pie, la primera bolla aunque desde fuera no era muy clara, desde el agua y con la fila de nadadores en la que nos vemos inmersos, es pan comido situarla. Pongo un ritmo tranquilo, no hemos podido calentar en el agua antes de la salida y no quiero despertar viejos fantasmas en forma de ansiedad. Pronto cojo lo que para mi es velocidad de crucero, como siempre no tener mucho que contar del agua siempre sin buenas noticias. Agua fría pero menos de lo esperada, bollas muy fáciles de divisar y seguir y entorno aparentemente muy seguro nadando en grupo en todo momento, en poco más de 40' estoy fuero, algo más de lo que esperaba, pero lo importante es que tenemos pie y medio en la bici.

Transición cómoda y sencilla, neopreno de diez en su estreno, algo menos de "gama" que el anterior pero infinitamente más cómodo. Dudas por unos segundos si seguir con el plan de abrigo o no pero finalmente es un acierto optar por enfundarme un cortavientos ligero y guardarme de los 13º exteriores y la bajada del primer puerto.

Me subo a la bici muy entero, el circuito es rápido pero técnico y ratonero hasta salir de la ciudad y comenzar con la subida al pueblecito que marcaría el punto más alto de la jornada. Una subida constante que casi dejaría acumulados los 900m positivos que nos esperaban como menú del día y dando lugar a una vuelta a la ciudad prácticamente en constante bajada desde el kilómetro 38. Voy cómodo, para nada exprimiéndome al máximo pero consciente de que los números de bici acumulada en el invierno no son para tirar cohetes, bajada peligrosa, veo un par de caídas feas y no estamos como jugárnosla, nos esperan dos enanos con los que jugar toda la tarde.

Parte final muy rápida, por grandes avenidas y de nuevo cometo el error de comer más de lo previsto, es normal, vas justito de fuerzas, te ofrecen productos de calidad y sabes lo que te queda por delante, pero debo recordar que en algunos temas en mejor ceñirse al plan y cumplir con lo entrenado. Me bajo de la bici en 3h, con una sonrisa en al cara y con piernas para correr. Una transición en pleno corazón del antiguo Turia dará paso a una alfombra roja de casi un kilómetro y un ambiente como el de las grandes ocasiones, allí están ellos, bander, cencerro y cariño, no necesito más para saltar sobre las zapas e intentar marcar ritmo fuerte desde el inicio.

Los fantasmas de Cascais vuelven, presión en el estómago, es como si un puñal me pinchara en el costado cada vez que intento apretar un pelín la marcha.

Salgo a correr con ganas, habrá que hacer un primer bucle de poco más de un kilómetro paralelo a la transición para después completar dos vueltas de 10km por el parque del antiguo cauce del río con un pase por línea de meta. Nada más salir me espera mi gente, subidón y a seguir, el enano con la bandera y el cencerro es imposible que pase desapercibido jajaja menudo crack!! Sigo mi camino, primer paso rápido por meta y a la bajada de nuevo al circuito algo no va bien, los fantasmas que no me dejaron correr en Cascais vuelven, presión en el estómago, es como si algo me hubiera sentado mal o un puñal me pinchara en el costado cada vez que intento apretar un pelín la marcha, voy jodido, pero convencido de haber hecho las cosas bien y que esa barrita final en bici no me va a estropear el día, camino en el primer avituallamiento, unos tragos de cola fresquitos e intento arrancar, sigo igual, pero en el segundo avituallamiento de la ida de esta primera vuelta paro y decido no arrancar sin solución, me bajo el mono camino del Poti Poti e intento sentarme en el baño o vomitar por partes iguales, ni una ni otra, pero algunos gases salen y decido salir, refrescarme, seguir andando mientras me coloco el tritraje y que sea lo que tenga que ser.

Todo eso ocurrió, pasó la zona de residuos y decido volver a correr pero esta vez a ritmo cómodo, nada forzado, benditos kilómetros siguientes, buenas sensaciones, ambiente de 10 con todo el mundo animando y mi cuerpo sin molestias mandado gas a mis piernas. Empiezo a ver ritmo muy cercanos a los 5' el kilómetro y a seguir con el plan: correr, disfrutar, estar presente, andar en los avituallamientos para beber siempre sin pasarme, geles y correr más.

Completo una primera vuelta buenísima, disfruto de los ánimos de mi gente, flipo en el paso por meta de esta segunda vuelta y vuelo, vuelo durante 10km.

Completo una primera vuelta buenísima, disfruto de los ánimos de mi gente, flipo en el paso por meta de esta segunda vuelta y vuelo, vuelo durante 10km, corriendo como nunca recuerdo en carrera, con una sonrisa en la cara y haciendo cálculos para meter la media por debajo de 1:55:00 y el total en menos de 6h.

Y lo creáis o no, eso ocurrió, entrada en meta eufórico, ellos gritando, la gran M espera al fondo, la Ciudad de las Ciencias y las Artes parece tenernos inmersos en un escenario futurista, el speaker haciendo su trabajo y yo gritando como un loco. Meta, felicidad, el gran Alejandro me premia con una fotos buenísimas, lo felicito por la que han liado, lo celebro con mi gente un poco mas valla de por medio y me retiro feliz, muy feliz a mi momento de reflexión y disfrute. Ropa limpia, comida rica y felicitaciones con todo el que me cruzo medalla al cuello.

Durante la carrera me acordé de mucha gente, pero en especial de Juan, Roberto y Migue, apretad chicos, yo tuve mi momento malo y lo superé y a vosotros a pesar de todo os veré en la Media de Granada, recordad que el premio está en el camino y la meta en la línea de salida, VAMOOOSS!!

A nivel organizativo esta gente de IRONMAN ha puesto el listón muy muy alto, será difícil superarse, en los detalles está la excelencia y ellos la han rozado.

A nivel organizativo esta gente de IRONMAN ha puesto el listón muy muy alto, será difícil superarse, en los detalles está la excelencia y ellos la han rozado: los enclaves de las transiciones, los recorridos (quizá el único a pulir un poco el de ciclismo), el montaje en general, la bebida fría durante todo el recorrido, los geles en bandejas de hielo (aún me explota la cabeza con este detalle), helados en la comida final y un cariño al triatleta siempre siempre presente. Yo vuelvo, menuda tontería, ya tengo dos inscripciones cerradas para lo que queda de año jajaja lo mio no tiene solución.

Finisher primera edición IRONMAN 70.3 Valencia.